3. No siempre serás el blanco de sus bromas
Por más que lo odies, siempre tendrás un poco de celos, sobretodo cuando ya no eres el más pequeño al cual fastidian. Sin embargo, también lograrás tener a tu propia víctima de juegos o un aliado contra tu hermano mayor.
Ser el hermano del medio tiene sus ventajas, podrías aliarte con cualquiera de los lados según las circunstancias, fastidiemos al menor entre ambos o defendámonos del mayor.
4. Sus muestras de cariño pueden ser un tanto «excesivas»
¿O acaso le está salvando la vida con la maniobra de Heimlich? Muchas veces nuestros hermanos nos sacan de quicio hasta el punto de querer asfixiarlos (inocentemente), pero al final siempre nos damos cuenta del cariño que les tenemos, a pesar de su amor «asfixiante».
Como decía Quino en su famosa historieta mafalda: «Acabo de tener un round de cariño».